Los vinos de las nueve denominaciones de origen de la Comunidad siguen en alza y mantienen perfectamente el tipo a pesar de los zarpazos de la crisis, según se desprende del informe del 2010 presentado ayer por la consultora Nielsen sobre el mercado de los vinos con D.O. de Castilla y León.
Los resultados del citado estudio ponen de manifiesto cómo los caldos de Castilla y León mantienen su segunda posición en el mercado nacional, con una cuota de participación del 18,5 por ciento, por detrás de La Rioja. Además, en el «haber» figura como hecho destacable que han sido los que han experimentado un mayor crecimiento en el conjunto nacional, ya que sus ventas han subido un 7,3 por ciento, frente a una reducción media de las comunidades del 0,9 por ciento.
Esta positiva evolución tiene dos explicaciones fundamentales: por una parte, que en el canal de la hostelería, en claro retroceso en el conjunto nacional de los vinos con denominación (han caído un 6,1 por ciento), los caldos de la Comunidad han experimentado un aumento de ventas del 6,6 por ciento, de forma que su participación en el mercado nacional de bares y restaurantes se sitúa en el 22,6 por ciento, lo que supone que uno de cada cuatro vinos que se consumen en los establecimientos hosteleros de una denominación de origen de Castilla y León.
Pero, además, en el canal de alimentación, que se ha incrementado a nivel nacional un 6,6 por ciento, también se ha producido un notable aumento que se eleva hasta el 8,3 por ciento, lo que demuestra, según el informe, que se ha conseguido una correcta adecuación de los caldos de la región a las necesidades y preferencias del consumidor en el canal de alimentación. También es verdad que se ha producido una reducción de precios que ha bajado en un 7,7 por ciento el valor de las ventas en el conjunto nacional.
De hecho, según el informe, el año 2010 se ha caracterizado por un abaratamiento de la categoría, tanto en el canal de alimentación como en el de hostelería. Mientras en el primero, todos los niveles de precios han tenido un comportamiento positivo, excepto el de más de 10 euros, siendo el nivel de 1,5 a 2 euros el que más se ha desarrollado, en el canal de hostelería, se han producido descensos en todos los niveles de precios, con excepción del de menos de dos euros, que han sido el único que ha experimentado un crecimiento del volumen de ventas. En conclusión, ha sido necesario adecuar los precios de oferta al entorno actual, buscando un aumento de la competitividad en alimentación y en hostelería
En cuanto a las distintas figuras de calidad, ha sido especialmente destacado el comportamiento de los vinos blancos de Rueda, hasta el punto de que lideran las ventas de este tipo de vinos en el conjunto nacional con un 32 por ciento de cuota de mercado, muy alejada de la siguiente denominación, Rías Baixas, que se sitúa en el 11 por ciento.También la Denominación Ribera del Duero ha mantenido el pasado año un crecimiento sostenido de las ventas, mientras que se ha producido un descenso en los vinos rosados, en este caso asociados a Cigales y Tierras de León.
Por último, los aumentos de participación de mercado se ha producido en casi todas las zonas geográficas de España, si bien la Zona Centro y Madrid siguen concentrando la mayoría de las ventas con un 41% y un 27,8% de cuota de mercado, respectivamente.
Con estos datos, la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, aseguró que «los resultados del informe ratifican el acierto del trabajo que realizan las 540 bodegas de la Comunidad, enmarcado en el apoyo de la Consejería hacia los vinos con denominación de origen».
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